jueves, 29 de marzo de 2012

El Hospital de los Marqueses de Linares

El Hospital de los Marqueses de Linares es un precioso edificio de ladrillo de aire neogótico, formado por tres naves con un patio interior en el centro y  rodeado de jardines. Tras el cese de su actividad asistencial, ha sido restaurado y transformado en un pequeño museo. Su visita supone un recorrido por la compleja historia política, social, económica y sanitaria tanto de España como de Linares durante la segunda mitad del siglo XIX, tan imbricadas estuvieron las vidas de los marqueses con los cambios de la época.

D. José de Murga y Reolid, hijo de ricos comerciantes y educado en el extranjero por lo que dominaba varios idiomas, contrajo matrimonio con Dª Josefa Osorio y Ortega, de origen humilde, en 1856. La diferente posición social de ambos contrayentes resultaba atípica para la época. Debido al apoyo que D. José  le dio a Amadeo I de Saboya, esté le otorgó en 1873 el título de Marqués de Linares en agradecimiento a sus servicios. La división de la sociedad española entre Borbones, carlistas, nacionalistas, socialistas y anarquistas provocó la abdicación del rey. Éste, tras tildar al país de "ingobernable", abandonó España en Enero 1873 y regresó a sus Italia natal. El suceso da lugar a la 1ª República que se extiende hasta el  pronunciamiento en Diciembre de 1874 del General Martínez Campos que, un año después reinstaura la monarquía de la mano de Alfonso XII. La temprana muerte del monarca y la corta edad de Alfonso XIII hacen que sea sucedido por su esposa, la regente Mª Cristina. Alfonso XIII es coronado en 1902, a la edad de 16 años.

Durante este periodo, España sufre un duro golpe económico al terminar de perder sus colonias en 1898. Posteriormente la Guerra Mundial, la huelga general y la impopular Guerra del Rif, generan un creciente malestar social con grandes tensiones políticas que propician el golpe de estado y el inicio en 1923 de la Dictadura de Primo de Ribera, apoyada por el rey.

Es en esta segunda mitad del S. XIX  cuando se descubre galena argentífera en Linares. Con la explotación de las minas llega una gran cantidad de inversión extranjera, se abren bancos, se construye el ferrocarril y se inaugura la estación de Linares en 1877. La población pasa de 7000 habitantes a 40000 en tan sólo 7 años. La sociedad linarense de entonces abarca desde los ricos aristócratas, los ingenieros burgueses, los comerciantes y una gran masa de trabajadores y paupérrimos mineros, muchos de ellos inmigrantes.

Dadas las penosas condiciones laborales en la mina, con una esperanza de vida para sus trabajadores que no superaba los 30 años, los Marqueses inician en 1890 el proyecto del Hospital. Ese año compran y ceden los terrenos para su construcción. Un Patronato formado por el Ayuntamiento y la Iglesia lleva a cabo el proyecto. Las obras se inician en 1905. El arquitecto inicial fue Francisco de Paula Casado, aunque el artífice final fue Arturo de Navascues. El edificio se termina en 1909 aunque, por diversas discrepancias, no es inaugurado hasta 1917.

En 1918 los cuerpos de los marqueses son trasladados desde Madrid para su reposo en la cripta. Es ésta la verdadera joya del museo. Fue obra de Lorenzo Collaut Valera y ganó la segunda medalla en la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1908.  El Mausoleo de los Marqueses, de influencias renacentistas, reproduce sus figuras talladas en mármol blanco, inmaculado, de alta calidad y adornado a su vez con esculturas de mármol y bronce, a modo de homenaje a la vida y obra de los marqueses. En la cabeza y los pies se recrean alegorías de la Fe, la Esperanza y la Caridad, mientras que las figuras de los laterales representan la atención piadosa a los enfermos y la labor educativa de los niños, tareas que preocupaban especialmente a la marquesa. Además de la cripta central, hay sendas capillas laterales decoradas por las esculturas de San José con el niño y de San Raimundo, vestido con su hábito. Ambas son también obra de Lorenzo Coullaut Valera. El techo es un precioso artesonado de madera labrada. Justo encima del Mausoleo luce una vidriera en forma de cruz que se corresponde con otra en el suelo de la capilla, desde la que se accede a la cripta. Esta capilla, que actualmente se usa como sala de congresos, está realizada en el estilo ecléctico de la época. La nave central abovedada, da paso a las laterales a través de arcos de medio punto, decorados con columnas y frisos de escayola pintados en tonos pastel. El altar reposa bajo una cúpula azul con estrellas doradas y se puede acceder al coro neogótico por una de las escaleras laterales. Allí se exponen algunas pinturas de Francisco Baños, entre otros artistas jienenses. El patrimonio litúrgico original de la capilla se exhibe en las primeras salas del museo.

Hay una zona del museo dedicada a recordar el funcionamiento del Hospital que ha estado en activo hasta 1980. Los enfermos ingresados eran cuidados por las Hermanas de la Caridad. Se muestra el material de la época, desde los instrumentos obstétricos para el parto hasta las placas de osteosíntesis para soldar los huesos rotos de los mineros. También hay material de botica, entre el que se incluye un curioso pildorero y un molde de supositorios.

Para terminar la visita hay una sala dedicada a Manolete, que murió allí el 29 de Agosto de 1947, a los 29 años de edad, tras la cogida por "Islero", el 5º toro de la tarde de la Feria de San Agustín. El Miura le ensartó en el momento en el que Manolete, tras una gran faena, le clavó el estoque. Torero y toro entraron a matar. Se expone el parte médico, que cotilleé por simple deformación profesional, y un poco de curiosidad. En él se describe una herida en el muslo de 5 cm de profundidad en el triángulo de Scarpa, a la altura del cayado de la safena que se extiende 20 cm lateralmente y 25 medial y superiormente y que destruye el paquete vasculonervioso femoral. Curiosamente, el informe médico sitúa el desgarro en el muslo derecho mientras que la noticia del periódico refiere la cogida en la pierna izquierda. Esta discrepancia me llamó la atención, pregunté pero no pudieron resolver mis dudas. He investigado en reportajes fotográficos de la corrida y me parece que es el médico el que lleva razón, es en la zona del muslo derecho donde le comprime su cuadrilla para cortar la hemorragia, al sacarle del ruedo.



3 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias por acercarnos un poquito más a nuestra tierra. Con tu relato sobre el Hospital de los Marqueses de Linares me has hecho recordar muchas cosas, especialmente los nacimientos, muchos de tus primos y primas han nacido en sus habitaciones: María José, Sole, Paloma, Anto, María, Juan Esteban, Rocío, María del Mar y Andrés. El Posti también pasó un par de noches en el Hospital


Precisamente hoy, día de Huelga, me ha venido a la memoria los grandes momentos de esplendor de Linares, donde se concentraba el mayor núcleo industrial de Andalucía y uno de los mas activos de España. Hoy no quedan nada más que parados, subsidiados y muchos jóvenes desilusionados. Por no haber, hoy no hay ni piquetes, algo impensable pocos años atrás.

Respecto a Manolete, te diré que fue herido en el muslo derecho por el pitón derecho de Islero al cruzarse ambos en el camino de la muerte.

Un beso, JMD.

Anónimo dijo...

me ha llamado mucho la atención lo de la herida de Manolete en la parte derecha. Te diré que el médico que lo atendió se llamaba Fernando Garrido y estaba muy acostumbrado a tratar heridas de ese calibre, pues le llegaban muchos mineros con heridas producidas por los barrenos o desprendimientos de las minas, así que él fue el primero que lo trató y lo estabilizó. El problema es que luego vino otro médico de fuera llamado por Manolete y su cuadrilla y ordenó una transfusión. Fue entonces cuando se produjo la muerte. De Señora.

Anónimo dijo...

Tu información es correcta. El Doctor de confianza de Manolete, Jimenez Guinea, que se desplazó hasta el Hospital una vez conocida la gravedad de la cogida,ordeno una transfusión de plasma (creo que Noruego) y poco después Manolete dejo de existir para convertirse para siempre en un mito.